Byron Castillo ha tenido un 2025 para el olvido, marcado por un bajo rendimiento y pocas oportunidades para destacar. Esta situación ha generado malestar entre la afición, que pide su salida del Ídolo al cierre de la temporada.
Sin embargo, el club decidió renovarlo por tres años más, lo que ha abierto un intenso debate sobre su futuro y el papel que podría desempeñar en el equipo durante 2026.
La directiva y el cuerpo técnico deberán definir si el lateral derecho continúa en el plantel o si se buscará una salida a préstamo para que recupere ritmo y confianza. Mientras tanto, la hinchada se mantiene dividida sobre su permanencia en el club.

