Segundo Castillo lanzó una reflexión contundente sobre el trato y la exigencia que reciben los jugadores según el tipo de entrenador que los dirige. El exjugador afirmó que los técnicos ecuatorianos son mucho más exigentes desde el primer día, mientras que a algunos entrenadores extranjeros se los cataloga rápidamente como “grandes” sin el mismo nivel de presión.

En sus palabras, Castillo señaló:
“En los entrenadores locales hay poca paciencia; nos exigen al máximo de entrada, y viene un DT de otro país y son ‘grandes’.”

Sus declaraciones abren el debate sobre la percepción del trabajo local, el trato dentro del fútbol ecuatoriano y el reconocimiento —o falta de él— hacia los técnicos nacionales.